TSM se implementa a través de un conjunto de protocolos que las empresas mineras miden e informan públicamente sobre su desempeño en los informes de progreso anuales de TSM.

Cada protocolo se compone de un conjunto de indicadores que están diseñados para medir la calidad y la exhaustividad de los sistemas de gestión a nivel de las instalaciones y están destinados a brindar al público una visión general del desempeño de la industria en áreas ambientales y sociales clave. Cada organización participante tiene la capacidad de hacer ajustes menores para adaptarse a las necesidades particulares de su jurisdicción.

Una de las fortalezas clave de TSM es que las empresas mineras están midiendo dónde se lleva a cabo realmente la actividad minera, a nivel de instalación. Los resultados brindan a las comunidades locales una visión significativa de cómo le está yendo a una mina cercana. Actualmente la Cámara se encuentra en el proceso de adaptación de los 9 protocolos.